¿Emprender contribuye a la
felicidad humana?
El
presidente de Uruguay, José Alberto Mújica, sorprendió a medio mundo con
su discurso en la Cumbre Rio+20, alertando sobre la necesidad de gobernar el mercado
y cuestionando el actual modelo de desarrollo social y económico.
El discurso
está lleno de frases cargadas de significado, pero se puede resumir en este
fragmento de la parte final:
“El desarrollo
no puede ser en contra de la felicidad. Tiene que ser a favor de la
felicidad humana, del amor arriba de la Tierra, de las relaciones humanas, de
cuidar a los hijos, de tener amigos, de tener lo elemental.”
Los emprendedores
y los empresarios somos una pieza central del desarrollo económico y por
ende de la construcción de la sociedad. Por ello, emprender, además de ser un
acto de creatividad, autorrealización y autonomía personal es también un acto
de responsabilidad. Debemos preguntarnos si nuestro negocio, además de
rentable, aportará algo positivo a la humanidad, o cómo mínimo a nuestro
entorno.
Esta es la
base de lo que académicamente se ha llamado Responsabilidad Social
Empresarial. A través de ésta se pretende medir el impacto global que tiene
una empresa a través de su impacto económico, su impacto social y
su impacto ambiental.
Seguro que
le vemos a nuestro proyecto todas las bondades del mundo, pero, preguntémonos
por un instante: ¿qué otras consecuencias puede generar? ¿Los recursos
utilizados compensan la satisfacción que genero a mis clientes? ¿Mi
empresa satisface también a mis trabajadores, a mis proveedores,
a mis conciudadanos?
El objetivo
de un emprendedor no es nunca únicamente económico. Nuestro proyecto
empresarial es un reflejo de nosotros mismos. Suele contener elementos de realización
personal, de liberación de energía creativa, de deseo de independencia…
Contiene también nuestros valores y convicciones, lo que hay en
lo más profundo de nuestra personalidad.
Fuente: http://www.idaccion.com/contribuye-el-emprendedor-a-la-felicidad-humana/#more-1000
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