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martes, 2 de julio de 2013

LA NUTRICIÓN CELULAR

Ya he dicho, en artículos pasados, que algunas personas dicen que somos lo que comemos. Y tienen razón. Muchas veces identificamos el aspecto físico de las personas con la salud. Si vemos una persona delgada, casi podríamos jurar que goza de buena salud, pero esto no es exacto, ya que la obesidad no es la única manifestación de una salud deteriorada por una mala nutrición.
Así que hablemos de nutrición celular.
Cuando hablamos de nutrición celular, comenzamos a pensar si nuestros alimentos tienen los componentes necesarios para nutrir nuestro organismo sanamente, comenzando por los tejidos, y sabemos que debemos evitar el consumo de aquellas cosas que inciden directamente en el detrimento de nuestra salud, tales como las grasas trans, el exceso de azúcares, las harinas refinadas, entre otras.
La clave de la salud radica en el equilibrio de nuestro cuerpo, y necesitamos suficientes antioxidantes para lograr neutralizar adecuadamente esos radicales. Para ello sería suficiente una alimentación con productos naturales y frescos. Sin embargo, gracias a la contaminación ambiental, el deterioro de la calidad de los alimentos que consumimos, y los elevados niveles de estrés a los que somos sometidos, hacen prácticamente imposible que una alimentación natural y balanceada, nos proporcionen los suficientes antioxidantes para gozar de la salud que deseamos, y es por eso que requerimos del consumo de ciertos suplementos.
Sabemos que nuestro organismo está permanentemente expuesto a los radicales libres, que se pueden formar en la atmósfera por la radiación, y también se forman en los organismos vivos (incluido el cuerpo humano) por el contacto con el oxígeno y actúan alterando las membranas celulares y atacando el material genético de las células, como el ADN.
Los avances tecnológicos han ayudado a generar importantes investigaciones en el campo de la salud, las que han arrojado resultados francamente interesantes, que han permitido determinar que las enfermedades encuentran un mejor caldo de cultivo cuando gozan de los efectos oxidantes producidos por el estrés, la mala nutrición, la contaminación ambiental y la dinámica de la vida contemporánea, que en muchos casos nos impide hacer ejercicio físico cotidiano.
Los embates de la vida moderna, que nos ofrece una alimentación viciada por productos que no son del todo frescos, otros que han sido enlatados y algunos químicamente manipulados, trae como consecuencia que nuestro cuerpo sea incapaz de pelear, de manera natural, con el ataque diario de los radicales libres.
Así es como hoy aparecen con más frecuencia manifestaciones más agresivas de enfermedades cardiovasculares, cáncer, diabetes, artritis reumatoide deformante, Alzhéimer, Lupus, Esclerosis Múltiple, entre otras.
Nuestra salud depende directamente de la alimentación y del cuidado que pongamos en el consumo de productos que nutren nuestras células. Es fácil, solo hay que incluir algunos suplementos balanceados, con los nutrientes adecuados, en los niveles óptimos.
Cuando logramos ofrecer a nuestro organismo las dosis requeridas de vitaminas y minerales, así como del resto de los nutrientes que requerimos, en unos días comenzamos a notar la diferencia, nos sentimos mucho mejor y gozamos de condiciones de salud óptimas, sobre todo cuando los antioxidantes empiezan a producir sus efectos.
Existen distintas compañías que producen suplementos que buscan la nutrición celular, en lo personal evitaré en este artículo recomendar marcas o compañías, porque aunque soy distribuidor de una de ellas y se maneja bajo el régimen de multinivel, la verdad es que mi objetivo no es que me compres productos, sino que comiences a vigilar tu propia nutrición celular, porque eso incidirá directamente en tu salud, y eso es lo que más me interesa.
Estos son algunos de los beneficios adicionales que te ofrece la Nutrición Celular:
-       Mantiene tu vitalidad,
-       Te da energía
-       Te da una apariencia saludable y jovial.
-       Ayuda a regenerar diariamente tu organismo.
-       Mantiene sanos y fuertes los tejidos.
-       Reduce el riesgo de padecer enfermedades, pues el sistema inmunológico se fortalece.
-       Regula la fisiología del organismo.
-       Mantiene eficientes las funciones físicas, emocionales y mentales.
-       Mejora la eliminación de toxinas.
-       Ayuda a mantener el peso y talla ideal.
Aquí te sugiero unos consejos prácticos que te ayudarán a retrasar el envejecimiento prematuro.
-       Dieta balanceada en calidad y cantidad;
-       Evita tóxicos como aceites refinados, azúcares y tabaco.
-       Come frutas, verduras, vegetales, granos enteros, semillas, frutos secos.
-       Consume diariamente pero con moderación, las proteínas que te aportan las carnes de aves, res, y ternera.
-       Trata de comer salmón, al menos dos veces por semana.
-       Toma entre 1.5 y 2 litros de agua al día, eso te ayudará a mantener hidratado y limpio tu organismo. (Ojo. Vigila el color de tu orina, éste debe ser lo más parecido al agua natural)
-       Consume poca grasa, de dos a tres cucharadas de aceite vegetal al día.
-       Consume grasas ricas en Omega 3, tales como Nueces, Almendras, Maní, Pistaches, Ajonjolí, Aguacate, Aceite de Olivo Extra virgen crudo, aceitunas, etc.
-       Haz ejercicio por lo menos tres veces por semana.
-       Utiliza regularmente algún programa de desintoxicación.
-       Protege tu cuerpo de los radicales libres, utilizando antioxidantes y suplementos de buena calidad. En la actualidad existen en el mercado varias opciones de buena calidad. (Consulta a tu médico)
Recuerda que tu cuerpo es el único que tienes. ¡Cuídalo! Lo que hagas hoy por mantenerte saludable es lo que te ayudará a tener una buena calidad de vida durante tu vejez. Descubre el potencial de tu organismo y vívelo. De ti depende que goces de las mejores condiciones de vida, que alcances la Abundancia Integral de salud y bienestar.

Fuente:  http://nuevodinamo.com/la-nutricion-celular/